Nos disponíamos a regresar cuando un viejecita se acerca a nosotros para pedirnos rait a un pueblito que se llama el Mendozeño como a 15 km de Satevó, nosotras íbamos ya de regreso a Chihuahua, pero nos dio pena y no nos quedó otra que hacerle el favor ya que insistió bastante. Cuando le dijimos que sí, fue bien cómico ya que esta señora con un grito les aviso a sus amigos y cuando menos pensamos teníamos cuatro viejecitos para trasladar de unos 85 años. Resulto que el carro no era lo suficientemente grande para ir todos, así que ellos mismo tomaron la decisión de dejar al único hombre del grupo para que él consiguiera otro rait, total que subimos unas despensas y unas cobijas que cada una traía y nos arrancamos rumbo a nuestro destino. En el camino resulto que eran súper conocidas de mi abuelito y abuelita y bueno no dejaron de hablar un solo minuto, todas querían hablar al mismo tiempo y como niñas se peleaban para captar nuestra atención, mi mamá y yo sólo nos volteábamos a ver, mientras mi sobrino ponía cara de susto jajajaja, en eso una de ellas dice- hay que barbaridad con este clima como me duele la garganta y otra ni tarda ni perezosa le contesto -nombre no es el clima, es por lo perica que eres. Nos hemos reído todo el camino con esta bendita juventud, el cuerpo se arruga pero el alma sigue allí joven y reluciente. Viva la juventud y viva la vida : )
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